Trilogía del Coronavirus
Máximo SandínSin embargo, la atribución de cualidades, incluso de intenciones, a un ente biológico que en estado libre es inerte, a una molécula de ADN o (en este caso) de ARN empaquetado con una densidad casi cristalina, en una cápsida proteica envuelta en una capa de lípidos, un ente que no se puede considerar un ser vivo, produce una cierta desconfianza en estas interpretaciones científicas, por muy prestigiosos que sean sus emisores. Pero lo que lleva la desconfianza al límite de la sospecha, es cuando la prestigiosa revista científica Nature (Nature Medicine 17 de marzo) publica un artículo en el que concluye que el virus covid 19 “no es un virus obtenido en un laboratorio o manipulado a propósito”, un estupor que puede equivaler, al producido porque en una revista de astrofísica, se publicase un artículo destinado a demostrar que la Tierra no es plana.
La pregunta que surge es ¿por qué una revista tan prestigiosa, se dedica a contradecir un supuesto infundio, que ni siquiera debería de ser tenido en cuenta científicamente, por proceder del campo de lo que se suele calificar de “conspiranoico”?